EL BANDIDO CUCARACHA

 

La leyenda del bandido cucaracha ha sido recuperada por los "Titiriteros de Binéfar" en forma de cómic y actuación con marionetas.


Mariano Gavín nació con el final de la primera guerra carlista (1840), en Alcubierre.

De pequeño fue pastor pero no le gustaba trabajar, se dedicaba a la caza furtiva.

Su apodo le venia de lo bien que cantaba de chaval "La Cucaracha".

A los 20 años se retiró de pastor para casarse con Jobita Amador una moza sencilla y trabajadora de Alcubierre.

La miseria era una realidad entre los pobres de la comarca, así que un día Mariano Gabín y su amigo Juan Ardid Jordán, no teniendo que comer decidieron coger un corderillo de un corral. El dueño los descubrió y Mariano para defender a su amigo le disparó en la pierna.

Tras esta se fueron sucediendo multitud de hazañas similares.

A "Cucaracha" no le fue difícil encontrar pronto compañeros, ya que había mucha gente descontenta por el hambre y la situación social del momento: muchos al servicio de unos pocos terratenientes.

El primer reclutado fue Antonio Sampériz Peralta "El Cerrudo", pero pronto serían muchos más: Agustín Alamán Corvinos "Farineza", el "Villanueva", "De Diego", "Magencias", el "Vívora", "Mayarito", "Sastre"... Llegando a ser unos cincuenta.

Pronto se comenzó a hacer eco de que una cuadrilla de cuatro a siete malhechores, aterrorizaban a los habitantes de la comarca con sus robos y asesinatos.

Para tranquilizar a los pueblos de la comarca, se enviaron treinta guardias civiles al mando de un capitán, a pesar de todo los bandoleros de "Cucaracha" siguieron haciendo de las suyas Una banda tan numerosa tenía unos grandes gastos. El miedo a "Cucaracha" y a los suyos se extendió por todos los Monegros. Nadie se atrevía a negar los tributos que estos exigían.

El sistema era casi siempre el mismo: mataban alguna oveja y mandaban al pastor con una carta para el amo pidiéndole dinero. En realidad "Cucaracha" despreciaba a los ricos, así pasó a la historia como el bandolero que robaba a los ricos para dar a los pobres.

Uno de los pasajes más anecdóticos y conocidos es el de un chiquillo que iba en su burro al molino de Alcubierre con tan solo dos pesetas, que su padre le había dado por si se encontraba con el bandido y se las robaba. No se equivocaba, "Cucaracha" se acercó al chico y le pregunto que dinero llevaba, respondiéndole que su padre tan sólo le había dado dos pesetas por que temía que el "Cucaracha" se las quitara.

Entonces el bandido le dio unas monedas mientras le decía: "pues toma dinero y dile a tu padre que Cucaracha quita dinero a los ricos y da a los pobres".

Durante los cinco años que duró el terror, se acumularon noticias de las fechorías, unas ciertas y otras noveladas por las gentes, que en muchos casos le encubrían y protegían.

Poco a poco fueron cayendo los hombres del "Cucaracha" a manos de la guardia civil.

El 28 de Febrero de 1875, moría Mariano Gabín y Suñén y lo hacia a manos de la guardia civil.

Según algunos fue tras una feroz batalla entre las fuerzas del orden y los bandidos, aunque popularmente se cuenta que primeramente la guardia civil envenenó el vino que la cuadrilla iba a beber, para poder acabar más tarde con la vida del bandido "Cucaracha" y cuatro bandoleros más que junto a él se encontraban.